Trastornos periodontales tales como la pérdida de dientes y la gingivitis se han identificado como un posible marcador de riesgo para la enfermedad cardiovascular (ECV) en un gran estudio que se publica en ‘European Journal of Preventive Cardiology’.
En este trabajo, más de 15.000 pacientes con enfermedad coronaria crónica aportaron información sobre su salud dental, con resultados que muestran que los indicadores de la enfermedad periodontal, como pérdida de dientes o sangrado de encías, eran comunes en este grupo de pacientes y se asocian con múltiples factores de riesgo cardiovascular y socioeconómicos.
Por el contrario, una menor prevalencia de pérdida de dientes se vinculó con niveles más bajos de factores de riesgo de ECV, incluyendo niveles más bajos de glucosa, colesterol de lipoproteína de baja densidad, presión arterial sistólica y circunferencia de la cintura. La diabetes y el tabaquismo también fueron menos frecuentes entre los pacientes con más dientes.
El informe resumió la información sobre la salud dental que dieron los pacientes de ‘STABILITY’, un ensayo clínico que incluyó a 15.828 voluntarios de 39 países, todos con enfermedad coronaria crónica y al menos un factor de riesgo adicional para enfermedades del corazón.
A todos los participantes se les había hecho un examen físico y análisis de sangre y completaron un cuestionario de estilo de vida, que incluía información sobre la salud dental, informando del número de dientes que les quedaban (ninguno, 1-14, 15-20, 21-25, 26-32 o todos) y la frecuencia de sangrado de las encías (nunca/rara vez, a veces, a menudo o siempre).
Los resultados mostraron una alta prevalencia de pérdida de dientes: el 16 por ciento dijo no tener dientes y el 41 por ciento informó poseer menos de 15 dientes. Aproximadamente una cuarta parte de los pacientes (26 por ciento) dijo sufrir sangrado de las encías al cepillarse los dientes, pero hubo algunas variaciones en los resultados dependiendo de la región, el país y la etnia, con las tasas más altas de pérdida de dientes y sangrado de las encías en Europa del Este. En general, casi el 70 por ciento de los participantes eran fumadores actuales o lo habían sido.
El análisis estadístico mostró que el aumento de la prevalencia de pérdida de dientes se asoció significativamente con niveles más altos de glucosa en ayunas, de colesterol LDL, presión arterial sistólica y circunferencia de la cintura. Una mayor prevalencia de sangrado de las encías se asoció significativamente con altos niveles de colesterol LDL y presión arterial sistólica.
Según los autores, se trata del estudio más grande de su tipo para evaluar las enfermedades dentales en pacientes coronarios y demuestra una mayor carga de factores de riesgo de ECV y mayores niveles de marcadores biológicos entre los que han perdido más dientes y sufren mássangrado de las encías, incluso después de ajustar por factores de confusión, como la edad, el tabaquismo, la diabetes y el nivel de educación.
Los hallazgos sugieren la existencia de factores de riesgo comunes de las enfermedades dentales y la enfermedad cardiaca coronaria y plantean la cuestión de si la salud dental puede ser considerada como un marcador útil de riesgo de ECV.
Las variaciones regionales observadas en la prevalencia de la enfermedad periodontal se podía explicar, en parte, por las diferencias regionales en la prevalencia de factores de riesgo cardiovascular, como por ejemplo fumar, según los autores, quienes añaden que tales diferencias “muestran una relación compleja en la que las disparidades demográficas, genéticas y socioeconómicas son factores que probablemente contribuyen”. Tanto el tabaquismo como los niveles más bajos de educación estaban fuertemente asociados con la enfermedad periodontal.
De hecho, el autor principal del trabajo, Ola Vedin, de la Universidad de Uppsala, en Suecia, afirma que “la relación evidente y consistente entre el estado dental y el riesgo cardiovascular en esta población podría apuntar a que la enfermedad periodontal es un factor de riesgo para el incidente coronario”. Sin embargo, añade que la observación de que la mala salud dental entre los pacientes coronarios crónicos está vinculada a una carga de riesgo cardiovascular más pesada no prueba una relación causal entre las dos condiciones.
“Todavía es una cuestión a debatir si la enfermedad periodontal es un factor de riesgo independiente para la enfermedad cardiaca coronaria. Algunos estudios apuntan a una asociación moderada, mientras que otros son contradictorios. Nuestros resultados muestran una relación entre enfermedad periodontal y diversos factores de riesgo cardiovascular y, como tal, apoyan una posible asociación entre las condiciones”, sentencia Vedin.
La edad y el tabaco son factores de riesgo bien conocidos tanto para la enfermedad periodontal como cardiovascular y con explicaciones biológicas establecidas. “Nuestros resultados también confirman la idea de que la enfermedad periodontal y el estatus socioeconómico están estrechamente relacionados.
Fuente: universocanario.com/salud